Andreas, ¿cuánto tiempo llevas ya trabajando en KIPP y cómo se llama la profesión que desempeñas??
En septiembre de 2013 comencé en HEINRICH KIPP WERK un aprendizaje como mecánico industrial. A los 3 años y ½ lo terminé y en el 2017 empecé a trabajar en la nueva nave de producción. La tarea que desempeño se llama preparador de tornos.
¿Qué es típico de KIPP?
Lo más típico de KIPP es lo excelente que fue el aprendizaje y que siempre recibí ayuda cuando no sabía algo. Además, aquí hay un ambiente laboral muy positivo.
¿Que ha sido lo más gracioso que te ha ocurrido en KIPP?
Un compañero se dejó el coche abierto. En la pausa, otro compañero se llevó el vehículo de allí. Al principio no se dio cuenta, hasta que, al terminar la jornada, se puso a buscarlo y no lo encontraba por ningún sitio.
¿Qué motivación lleva a los jóvenes a solicitar en KIPP un puesto de aprendizaje o para estudios superiores?
En KIPP se ofrecen multitud de oportunidades y aprendizajes en las más diversas profesiones. Lo bueno de una formación profesional es que, durante ese periodo, siempre se ocupan de uno, el aprendiz pasa por todos los departamentos que hay y, con ello, acaba conociendo la empresa de arriba a abajo. También me parece muy bien que, al final, haya un alto porcentaje que acaba quedándose en la empresa.
¿Que le aconsejarías a los que comienzan en KIPP?
A los nuevos aprendices les recomendaría que no fuesen demasiado tímidos, sino que muestren un talante abierto hacia los otros empleados. Además les sugeriría que se informen antes sobre HEINRICH KIPP WERK y sus productos.
¿Cómo y donde recargas las pilas durante las pausas?
La pausa suelo pasarla en la pasarela que hay de camino al estanque. Es un buen sitio para desconectar del trabajo y recuperar energía.
